Rosas, lotos, lirios, pensamientos, margaritas, dientes de león, tiare, hibiscos, girasoles y muchos más: toda una constelación de diseños botánicos que se ven grabados con tinta en la piel de más y más personas. Si alguna vez te has preguntado qué está pasando con la locura del tatuaje, debes saber que esta tendencia ni siquiera está pasando de moda. Todo lo contrario: la tinta nunca ha sido tan popular entre los adolescentes como entre los cuarenta. No, las ganas de hacernos un tatuaje no nos han abandonado. Por otro lado, simplemente se ha metamorfoseado. Y el hecho de que hoy nos enamoramos cada vez más del tatuaje de flores es la prueba obvia.
Tatuaje de flores: ¿por qué no dejamos de preferirlo?
El tatuaje de flores y las chicas es la historia de amor. Fino, romántico y completamente personalizable, el diseño botánico, y en particular el floral, se encuentra entre las opciones “predeterminadas” para mujeres de todas las edades. Gracias a la infinidad de posibilidades en cuanto al diseño, el estilo y el tamaño de los patrones, podemos estar seguros de tener siempre un tatuaje único y personalizado. Símbolo por excelencia de belleza y feminidad, el tatuaje de flores es sin duda el patrón que mejor se adapta al sexo más justo.
El tatuaje de flores, ya sea de color o en blanco y negro, es una alternativa decididamente fresca y original a cualquier otro motivo, que ya hemos visto muchas veces por todas partes. Muchas mujeres se dan el paso y se hacen un bonito tatuaje de flores, más o menos discreto, transformando sus cuerpos en verdaderas obras de arte dignas de contemplación. Las flores parecen cobrar vida gracias al talento de los tatuadores que no dudan en arriesgarse con los diseños y estilos.
¿Qué lugar para un tatuaje de flores?
Con respecto a la ubicación de un tatuaje, esta elección generalmente se realiza de acuerdo con ciertos criterios que incluyen: tolerancia al dolor y la posibilidad de ocultar el dibujo a tinta en el lugar de trabajo. Además, las diferentes partes del cuerpo permiten hacerse tatuajes de diferentes tamaños, y esto también es un factor determinante en la elección. Por ejemplo, un tatuaje grande y muy intrincado es más adecuado para partes grandes del cuerpo como: espalda, omóplatos, cadera, muslo y pantorrilla. En cuanto a los dibujos de pequeño formato, aquí podemos hacer cualquier cosa en cuanto a ubicación. Un tatuaje pequeño y discreto puede ser, por ejemplo, entintado en la muñeca, en el dedo, detrás de la oreja o en el tobillo.
Sin embargo, como un tatuaje de flores no podría ser más original, femenino y moderno, podemos permitirnos todo el atrevimiento y posicionarlo en cualquier parte del cuerpo. Como ejemplo, vale la pena enumerar la cadera, la clavícula, el antebrazo, el hombro, el talón de Aquiles y los dedos, áreas que ocupan las primeras posiciones de interés en las mujeres.